Síntomas y tratamiento
En la mayoría de los adultos y "niños grandes" este virus determina una infección respiratoria con síntomas parecidos a los de una gripe: fiebre -no muy alta-, resfrío, tos y decaimiento leve o moderado. Estos persisten por pocos días y la recuperación es total y sin complicaciones. Por debajo de los dos años, el cuadro clínico corresponde a una bronquiolitis: se afectan los bronquios más finos -además de las vías respiratorias superiores- a la vez que se determina dificultad para respirar y eso se traduce en "fatiga" o respiración rápida y compleja. Es necesario indicar que este cuadro puede llegar a impedir la concreción de una correcta alimentación y descanso. En varias oportunidades se hace ineludible la internación de los bebés más afectados para un correcto tratamiento. En los infantes más pequeños de hasta tres meses de vida, los que ya han tenido crisis de broncoespasmo o fueron prematuros y necesitaron asistencia respiratoria en la etapa neonatal, se pueden desarrollar síntomas realmente severos; en este contexto se presenta dificultad para respirar mientras se torna aguda y de rápida instalación. Es así que el bebé necesitará grados variables de aporte extra de oxígeno y asistencia respiratoria mediante aparatos. También hay que tener en cuenta que el otro grupo de riesgo alto lo constituyen los niños pequeños portadores de cardiopatías congénitas.
No existe un tratamiento específico contra el VRS y tampoco se emplean antibióticos. Lo más importante en los niños pequeños es mantenerse alerta ante la presencia de los síntomas de alarma:
Al mismo tiempo, el pediatra podrá indicar medicación con el fin de bajar la fiebre o para dilatar los bronquios si hay broncoespasmo.
Profilaxis
Sin duda consiste en un punto realmente importante. Por lo tanto, se citarán las medidas necesarias en este tipo de situaciones, como también sucede con el resto de las infecciones respiratorias:
Los pediatras de SUAT están siempre a tus órdenes para responder las preguntas correspondientes a ésta y otras afecciones invernales. Recuerda que la información es salud como también la consulta inmediata con el especialista.
Dr. Rafael Decuadro
Pediatra de SUAT